Prosegur, compañía especializada en seguridad, gestión de efectivo y ciberseguridad, no está pasando por un buen momento en bolsa. Tras las fuertes caídas de marzo de 2020 fruto de la pandemia, las acciones de Prosegur apenas recuperaron parte de la caída durante 2021, volviendo a las caídas desde hace 1 año. De hecho, las acciones de Prosegur cotizan en niveles de los mínimos de la pandemia. Para hacer frente a esta situación, el Consejo de Administración ha decidido premiar a sus accionistas con un dividendo extraordinario.

Prosegur presenta una caída del 18% en bolsa en lo que llevamos de 2022. Esta empresa se caracteriza por tener un negocio estable, aunque decreciente en los últimos años, y un dividendo apetitoso para sus accionistas. El dividendo ordinario es de 0,031€ cada trimestre, alcanzando los 0,124€ por acción. Con un precio de referencia de 1,772€ por acción, esto supone una rentabilidad del 7%. A esto vamos a sumar un dividendo extraordinario, pagadero a final de diciembre, de 0,0656€ por acción.

¿Cuáles son las fechas clave para el cobro de este dividendo? Veámoslo.

- Jueves 22 de diciembre: Último día para comprar acciones con derecho al dividendo de 0,0656€ por acción (last trading date).

- Viernes 23 de diciembre: Primer día en el que las acciones de Prosegur cotizan descontando el dividendo (ex-date).

- Miércoles 28 de diciembre: Fecha de abono de 0,0656€ brutos por acción (0,053€ netos).

De este modo, la rentabilidad de este dividendo extraordinario es del 3,7%. Si tenemos en cuenta que además de estos 0,0656€, Prosegur ha pagado a sus accionistas otros 0,124€ en este 2022, el importe total de los dividendos de Prosegur alcanza los 0,19€ por acción, lo que arroja una rentabilidad por dividendos de Prosegur del 10,7%, de las más altas de la bolsa española. Si antes hemos dicho que el negocio de la sociedad es decreciente, ¿es sostenible este dividendo?

Los últimos resultados que tenemos de Prosegur son los relativos a los primeros 9 meses de 2022. Prosegur ha presentado unas ventas de 3.150 millones de euros, un EBITDA de 354M€, y un resultado neto cercano a los 60M€. Frente a 2021, los crecimientos en todas estas métricas han estado en torno al 30%, lo que demuestra una buena recuperación, pero todavía escasa para recuperar las cotas previas a la pandemia. La cuestión es: ¿el negocio permite costear el importe de estos dividendos?

El pago de este dividendo extraordinario va a suponer para la sociedad un desembolso de 36 millones de euros. Por otro lado, los dividendos ordinarios han supuesto una salida de caja de 68 millones, siendo el importe total de los dividendos desembolsados 104 millones de euros. Si el beneficio esperado para este 2022 estará en torno a los 80 millones, parece que el payout se situará bastante por encima del 100%. Además, por el momento parece que su flujo de caja tampoco cubre estos dividendos.

Así, Prosegur es una empresa que a día de hoy tiene un valor en bolsa de 970 millones de euros, y una deuda neta cercana a ese mismo valor, concretamente de 965 millones. Con un beneficio esperado de unos 80 millones y un EBITDA que rondará los 480 millones, Prosegur tiene un PER de 12 veces y un EV/EBITDA de 5 veces. Actualmente la cotización está cercana a mínimos históricos y está repartiendo más dividendos de los que se puede permitir.

Por lo tanto, y teniendo en cuenta que están siendo unos años difíciles para los accionistas de Prosegur, parece que el Consejo de Administración, y a la espera de que los resultados vayan mejorando año a año como parece que están haciendo, está adoptando una postura arriesgada incrementando la deuda de la sociedad para pagar dividendos y realizar diferentes adquisiciones. Veremos si la estrategia resulta ganadora en los próximos años.