A diferencia de lo ocurrido en el último mes, donde Repsol se ha visto favorecido por la revalorización del precio del crudo y, en consecuencia, su cotización en bolsa ha disfrutado de grandes subidas, en las últimas sesiones el valor ha sufrido un cambio de dinámica debido a la caída del precio del petróleo.

A pesar de lo ocurrido en las últimas sesiones, la perspectiva de futuro de la compañía es positiva. Así lo confirman los sólidos resultados correspondientes a los nueve primeros meses del año publicados por la empresa, donde obtuvo un resultado neto de 1.939 M€, lo que supone superar el resultado obtenido en el mismo periodo de 2019, es decir, ha conseguido superar los niveles obtenidos antes de comenzar la pandemia, cuando el beneficio era de 1.466 M€. Además, Repsol publicó una atractiva remuneración al accionista, así como la diversificación de su negocio.  

Las buenas perspectivas de futuro que ofrece la compañía han hecho que los grandes bancos de inversión amplíen su capital en la empresa. Un ejemplo de ello es JP Morgan, que ha ampliado su participación hasta superar el 5% del capital de Repsol, consolidándose como el segundo máximo accionista de la energética.  

Por último, destacar la apuesta firme que la energética española está realizando por nuevas vías de negocio, especialmente por el hidrógeno. En la última presentación de resultados, la empresa comunicó que va a producir hidrógeno renovable con una capacidad de 400 MW para el año 2025, afianzando así su apuesta por este sector.

Análisis técnico

Respecto al AT, la acción ha ido recuperando, poco a poco, el valor al que cotizaba antes de que comenzara la pandemia. Tal y como ocurrió en todo el mercado bursátil mundial, Repsol cayó bruscamente en bolsa a raíz de la llegada del Covid19, marcando mínimos en la zona de los 5€, aproximadamente. El valor consiguió rebotar con fuerza desde dicha zona tras dibujar un doble suelo.  

Cabe destacar que, en la recuperación del valor, la acción tuvo dos grandes impulsos alcistas (1 y 1’), haciendo un descanso entre ambos impulsos antes de romper el creek dibujado en el gráfico. A partir del segundo impulso mencionado, la cotización comenzó a dibujar un canal alcista de MP, el cual continúa respetando a la perfección.  

Actualmente, la cotización de Repsol se encuentra a medio camino del canal alcista en busca de apoyo, ya sea de la base de dicho canal o de su parte superior. La alta volatilidad del precio del petróleo está creando indecisión entre los inversores, razón por la cual el valor se encuentra en tierra de nadie.  

Por último, a continuación, se indican los soportes que el valor debe defender, así como las resistencias a superar, conforme se muestra en el gráfico adjunto: S1 9,85€, S2 9,30€, S3 8,75€; R1 11,20€, R2 11,80€.