En el día de ayer se conoció el dato del índice de precios al consume (IPC) en septiembre y, por fin, se puede confirmer que está empezando a dar una tregua. Según el dato facilitado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) el IPC se sitúa en el 9%, es decir, un punto y medio menos que en el mes anterior, lo que consolida la tendencia de moderación iniciada en los últimos meses, en paralelo al descenso de los precios de los combustibles y de la electricidad. Cabe destacar que desde el mes de mayo el dato mencionado no bajaba del psicológico doble dígito.

La subida del IPC empezó a hacer mella justamente hace un año, después de que en febrero del ejercicio pasado los precios energéticos comenzaran a subir y la reactivación de la economía, tras las restricciones de la pandemia, llevara el IPC del 1,3% al 3,3% en seis meses. Fue en septiembre del 2021 cuando, a raíz de la gran subida del precio de la electricidad, cuando el dato alcanzó el temido 4% y, a partir de ese momento, no ha parado de continuar la subida.

Según afirma el INE, esta moderación es debido a la caída de los precios de la electricidad, especialmente respecto a la subida que experimentaron en septiembre de hace un año y, en menor medida, al abaratamiento del carburante y del componente transporte. Como ejemplo, durante la sesión de ayer el precio del barril de petróleo de calidad Brent, referencia para el Viejo Continente, se situaba en un precio de 87 dólares, con un descenso del 0,7%, mientras que el Texas se colocaba en los 81 dólares, tras caer también un 0,7%.

Por otra parte, el IPC subyacente se redujo moderadamente desde el 6,4% registrado en agosto hasta el 6,2%, por lo que continua en niveles muy elevados. Cabe recordar que la tasa subyacente elimina los elementos más volátiles y más expuestos a variación del IPC y se tiene como el referencia más afinado a la hora de medir cuánto se ha encarecido la cesta de gasto tipo de un hogar español.

En relación al Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), que es un indicador estadístico cuyo objetivo es proporcionar una medida común de la inflación que permita realizar comparaciones internacionales y examinar, así, el cumplimiento que en esta materia exige el Tratado de Maastricht para la entrada en la Unión Monetaria Europea, se mantiene en el 9,3% y en términos mensuales habría permanecido sin alteración alguna en septiembre, según la información proporcionada por el INE.

Respecto a la influencia de los nuevos datos del IPC registrados en el mercado bursátil, cabe mencionar que los sectores más beneficiados y que puede tomarse un respiro son la industria y la construcción, ya que son los que más afectados se ven por la subida de los precios de materiales, energía, etc. Asimismo, el sector que peor parado sale es el sector bancario, ya que esto puede frenar a relajar la política monetaria del Banco Central Europeo que, aunque prevé continuar con las subidas de tipos de interés para revertir la espiral inflacionista, puede que no se vea obligado a tomar decisiones desmesuradas.

Por ultimo, repasando los motivos que han provocado la subida de los tipos de interés, destacan las consecuencias de la pandemia, los paquetes de estímulos otorgados, la problemática en la “supply chain”, el conflicto geopolítico que ha provocado una Guerra energética y, sin duda, la reacción tardía por parte de los organismos responsables. Todo ello conlleva a disponer de una menor capacidad de gasto y un menor consume por parte de la ciudadanía, un menor incentivo a invertir debido a la deuda más cara existente actualmente y, además, al impacto en el mercado de divisas con una clara preponderancia del dólar americano frente a la libra, al euro y a otras monedas.